El buque guardacostas donado por Corea del Sur tiene 30 años de antigüedad y, según expertos, es casi obsoleto por lo que su operación será muy costosa. La Armada ecuatoriana abrió un proceso de contratación, por USD 2.075.924, para la travesía de un buque guardacostas, donado por Corea del Sur, hasta Puerto Bolívar, en Ecuador. El contrato será adjudicado hasta el próximo 12 de diciembre de 2024 y el arribo de la embarcación al puerto ecuatoriano está previsto para el 23 de marzo de 2025.
El zarpe programado será desde Mokpo, en Corea del Sur, y la travesía hasta llegar al Ecuador abarca los puertos estadounidenses de Guam, Pearl Harbor y San Diego. El contratista se encargará del abastecimiento de combustible en cada puerto, suministro de agua potable, desalojo de basuras y desechos, contratación de remolcadores, asignación de muelles, soporte de procesos migratorios, pago de tasas portuarias y provisión de transporte para la tripulación en puertos.
La entrega de la embarcación fue suscrita el pasado 25 de abril por el comisionado general de la Guardia Costera de Corea del Sur, Kim Jong-uk, y el ministro de Defensa de Ecuador, Gian Carlo Loffredo. Para el proceso de contratación, destinado al traslado del guardacostas, la Armada solicitó una cotización a la compañía Inchcape Shipping Services S.A., de la que son accionistas: Iss Group Holdings Limited; y John Cook Agencies Limited. Ambas compañías son de Inglaterra.
El gerente general de Inchcape Shipping Services S.A. es el estadounidense, John Paúl Willemsen; el presidente Jairo Baque Castro con origen ecuatoriano; y el director, Víctor Oelckers Pumpin de origen inglés. De acuerdo con estándares internacionales, la vida útil de un buque guardacostas es de 25 a 30 años, posterior a ello el coste de su mantenimiento y los seguros hacen que su operación no sea rentable. La embarcación donada por Corea del Sur a la Armada del Ecuador es el Busan 3001, fabricado en 1994, es decir, tiene una antigüedad de 30 años.
Se trata de la unidad más antigua de la clase Tae Pyung Yang que tenía en operación la Guardia Costera de Corea del Sur. Según expertos en la materia, «costará una barbaridad mantenerlo, con una línea logística complicada por la tecnología coreana. Es más caro desmantelar, por eso regalan». La embarcación tiene 104,5 metros de longitud (eslora), 15 metros de ancho (manga), 5,3 metros de calado (profundidad), 4.000 toneladas de desplazamiento y capacidad de 65 tripulantes.
La Armada ecuatoriana incorporó el pasado 27 de mayo a su flota el buque donado por Corea del Sur y lo bautizó con el nombre de «BAE Jambelí MP-56». El guardacostas será destinado a patrullajes, especialmente contra el tráfico de drogas, que en los últimos meses se ha incrementado en el mar territorial ecuatoriano y en Galápagos. Actualmente reposa en aguas de Corea del Sur, según el mapa de Tráfico Marino.
Fuente: Radio Pichincha.