Tras las elecciones presidenciales en Ecuador, en las que el presidente Daniel Noboa fue reelegido con el 55,62% de los votos, varios políticos de izquierda y jefes de Estado del Socialismo del Siglo XXI, han cuestionado públicamente los resultados electorales. Luisa González, candidata derrotada de Revolución Ciudadana, habló de “grotesco fraude electoral” y exigió un recuento completo de los votos, aunque observadores internacionales como la OEA y la UE calificaron el proceso electoral de transparente.
Rafael Correa, expresidente de Ecuador y partidario de González, también expresó dudas sobre la integridad de la elección. Criticó especialmente el papel del Consejo Nacional Electoral (CNE) y pidió una revisión exhaustiva del proceso electoral.
El mandatario venezolano, Nicolás Maduro, calificó las elecciones en Ecuador como un “fraude horroroso” y llamó al pueblo a “defender su soberanía”.
El presidente colombiano, Gustavo Petro, también expresó su preocupación por las condiciones electorales en Ecuador. Pidió la publicación de todos los registros electorales para garantizar la transparencia del proceso y subrayó que no podía reconocer los resultados de las elecciones en las circunstancias actuales.
La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, anunció que México no renovará relaciones diplomáticas con Ecuador mientras el presidente Daniel Noboa permanezca en el cargo.