El expresidente de la Asamblea Nacional y exministro del Interior, José Serrano, se encuentra en el centro de una serie de audiencias judiciales que determinarán su futuro legal en dos países. Entre el 22 y 23 de octubre de 2025, se llevarán a cabo tres audiencias en Ecuador y Estados Unidos que podrían definir su situación judicial inmediata.
En Ecuador, este 22 de octubre, la Corte de Pichincha evaluará la apelación presentada por la Fiscalía en relación con la negativa a imponer prisión preventiva a Serrano y a su coimputado, Xavier Jordán, en el caso del asesinato del exasambleísta y excandidato presidencial Fernando Villavicencio. La Fiscalía busca modificar las medidas cautelares actuales, que incluyen la obligación de presentarse periódicamente en el consulado ecuatoriano en Miami, Estados Unidos. El 23 de octubre, se llevará a cabo una audiencia adicional en Ecuador para revisar las medidas cautelares impuestas a Serrano y Jordán.
Simultáneamente, en Estados Unidos, el 23 de octubre, se celebrará una audiencia en un tribunal migratorio de Miami para abordar la solicitud de asilo de Serrano. Esta audiencia ha sido aplazada en varias ocasiones, y la jueza Romy Leer deberá decidir si concede el asilo o si procede con la deportación de Serrano a Ecuador. Desde su detención el 7 de agosto de 2025 por parte del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) de EE.UU., Serrano ha permanecido bajo custodia en un centro migratorio en Miami.
La situación legal de Serrano es compleja. En Ecuador, enfrenta cargos relacionados con el asesinato de Villavicencio, mientras que en Estados Unidos, su estatus migratorio está en juego. La resolución de estas audiencias podría tener implicaciones para su futuro legal y político.
El caso de Serrano ha atraído la atención tanto en Ecuador como en Estados Unidos, dada su prominencia política y las circunstancias que rodean su detención y los cargos en su contra. Las decisiones que se tomen en estas audiencias podrían sentar precedentes en cuanto a la cooperación judicial y migratoria entre ambos países.
Se espera que las audiencias se desarrollen conforme a los procedimientos legales establecidos en cada país. Las autoridades judiciales han reiterado su compromiso con el debido proceso y el respeto a los derechos humanos en el manejo de este caso.
