Dos días de sesiones y cuatro de foros y actividades paralelas en el marco de la Reunión Anual de las Asambleas de Gobernadores del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y BID Invest dejaron como resultados un cambio de sistema de trabajo del banco, actualización de cifras, creaciones de fondos y otorgamiento de créditos al país anfitrión, Ecuador.
El principal resultado, según el BID, fue actualizar su estrategia institucional que regirá para 2020-2023, con miras a aumentar la movilización de recursos.
En un comunicado, el BID explicó que se sustentó en los pilares de asegurar la inclusión social e igualdad, fomentar la productividad e innovación, y promover la integración económica, pero también enfatizó la adopción de nuevas tecnologías y de la innovación en el sector público, en vista de las oportunidades generadas por la revolución digital.
Se aprobó un fondo migratorio para los países que reciben venezolanos por un monto inicial de $ 100 millones.
Se calculó la brecha de financiamiento anual para el desarrollo de América Latina y el Caribe, que según el BID equivale a $ 650 millones.
“Para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, los países de la región van a necesitar recursos que van mucho más allá de lo que puede generar el sector público o la banca multilateral. Según cálculos del BID, la brecha de financiamiento para el desarrollo de América Latina y el Caribe equivale a $ 650.000 millones por año. Es decir, 38 veces más de lo que el Grupo BID aprobó el año pasado”, sostuvo la entidad que celebrará su próxima reunión en Barranquilla, Colombia, en el 2020.
Para Ecuador se firmaron cuatro préstamos por $ 631 millones para mejorar los servicios de agua y saneamiento, energía, y vivienda social, y fortalecer la estabilidad fiscal.
Luis Alberto Moreno, presidente del Directorio del BID, anunció que se prevé aprobar este año un total de $ 1.900 millones en operaciones en el sector público y privado de Ecuador.
Sistema financiero espera reforma normativa
Después de las sesiones del BID, foros, créditos recibidos, uno de los pasos siguientes por seguir es aprovechar esas ideas y el financiamiento. Y en esa línea la Asociación de Bancos Privados (Asobanca) plantea como necesarios cambios en el marco normativo.
Liliana Rojas-Suárez, directora de la Iniciativa Latinoamérica del Centro para el Desarrollo Global, fue una de las visitantes. “Cuando se dice consideremos aplicar Basilea III en países como Ecuador no se trata de aplicar toda la regulación que es gigantesca, sino de seleccionar qué es lo más apropiado para las condiciones de desarrollo del país y para ellos son principios muy básicos que hay que desarrollar como buena gobernabilidad, transparencia de datos, recolección de datos, supervisión independiente de presiones políticas”, comentó en el último de los foros.
Si el modelo anterior se agotó y se camina a uno más privado, “necesitamos que el sistema financiero tenga un rol mucho más fuerte en la economía y para ello cambiar el marco normativo en distintos niveles”, dice el presidente de Asobanca, Julio José Prado. Ya hay proyectos que manejan entidades de control.
Fuente: El Universo