La Cancillería de Ecuador ha tomado la decisión de suspender temporalmente el acuerdo que permitía a ciudadanos chinos ingresar al país sin necesidad de visa, esta medida surge en respuesta al incremento no regulado del flujo migratorio proveniente de China durante los últimos meses.
Daniel Noboa, presidente de Ecuador, reportó que aproximadamente 60,000 ciudadanos chinos llegaron al país en los primeros tres meses del año 2024. Este aumento significativo ha llevado a la Cancillería a tomar medidas para asegurar un control migratorio más estricto, a partir del 1 de julio, los ciudadanos chinos deberán obtener una visa antes de ingresar a Ecuador. El Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana ha identificado que muchos viajeros chinos no han cumplido con los requisitos de salida dentro del plazo permitido de 90 días desde su ingreso, además, se sospecha que algunos utilizan Ecuador como punto de tránsito para viajar a otros países de la región, lo cual ha aumentado las preocupaciones sobre el cumplimiento de las normativas migratorias y el riesgo asociado de tráfico de personas.
En una entrevista con The New Yorker, Daniel Noboa expresó su preocupación por la situación y destacó la necesidad de regularizar el flujo migratorio para proteger tanto a los visitantes como al sistema de transporte aéreo del país. El Ministerio también está trabajando activamente para prevenir la trata de personas y el tráfico de migrantes, al mismo tiempo que asegura el funcionamiento adecuado de las aerolíneas que operan en Ecuador.
La decisión de Ecuador de suspender temporalmente la exención de visas para ciudadanos chinos responde a la necesidad de regularizar el flujo migratorio y garantizar un control adecuado sobre quienes visitan el país, esta medida busca proteger la seguridad y los derechos tanto de los ciudadanos ecuatorianos como de los visitantes extranjeros, mientras se mantiene la integridad del sistema migratorio nacional.