El ministro de Gobierno, José De la Gasca, afirmó que Ecuador vive un período de «positividad y felicidad» tras los resultados de las elecciones anticipadas del 13 de abril del 2025. En una entrevista con Radio i99 el martes 3 de junio, enfatizó que la mayoría de la ciudadanía se siente representada y confiada en el gobierno actual, particularmente en materia de seguridad y cooperación internacional.
A pesar de la ola de críticas de la ciudadanía en redes sociales y en algunos medios de comunicación, el ministro insistió en que los resultados de abril han fortalecido la unidad nacional. Según él, el apoyo de 82 legisladores de la Asamblea Nacional a un proyecto político común refleja un consenso excepcional y valioso en el país, facilitando la implementación de reformas largamente esperadas.
De la Gasca reconoció, sin embargo, que el gobierno ha cometido errores, pero afirmó que estos se están corrigiendo escuchando a la población. Añadió que la actual administración está comprometida a abordar los desafíos que enfrenta la vida cotidiana ecuatoriana, haciendo hincapié en medidas concretas para mejorar la seguridad, la educación y la transparencia institucional. Uno de los pilares del discurso del ministro es la lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico.
Afirmó que el gobierno no cederá ante estas amenazas y continuará fortaleciendo el aparato judicial y de seguridad del país. Según él, la rápida aprobación de varias leyes en estas áreas se presenta como prueba de eficacia política y capacidad de respuesta. Además, José De la Gasca reafirmó la voluntad del Ejecutivo de iniciar un diálogo sobre el establecimiento de una Asamblea Constituyente, aunque recalcó que esta disyuntiva debe basarse en el consenso nacional y no en enfoques unilaterales.
De igual manera, destacó que con la Presidencia de Daniel Noboa, se busca una transformación estructural que respete el Estado de derecho. Sin embargo, varias voces críticas piden cautela. Analistas políticos y representantes de la sociedad civil creen que el optimismo del ministro podría ocultar una brecha entre el discurso oficial y la realidad que experimenta una población que aún enfrenta la inseguridad, el desempleo y la precariedad. Desde las voces de la oposición, sobre todo de la Revolución Ciudadana, piden que este impulso se acompañe de acciones concretas y mensurables en los próximos meses.