En 2025, el pago de intereses de la deuda pública y la emisión de nuevos bonos incrementaron el gasto del Estado, generando un déficit fiscal de USD 1.983 millones hasta septiembre. Este déficit refleja que el país gasta más de lo que ingresa y debe cubrir la diferencia con deuda, lo que encarece el financiamiento. Entre enero y septiembre, el gasto público alcanzó USD 19.604 millones, mientras que los ingresos sumaron USD 17.621 millones. Fausto Ortiz advierte que, si la tendencia continúa, el déficit podría cerrar entre USD 4.500 y USD 5.000 millones, similar a 2023, año marcado por una grave crisis de liquidez.
Aunque el Gobierno proyectó un déficit de USD 5.600 millones para 2025, insiste en que es una cifra referencial. Factores como el aumento de bonos durante la campaña presidencial y el pago de intereses explican el alza del gasto, mientras que medidas como la eliminación parcial del subsidio al diésel tienen un impacto limitado en la reducción del déficit, ya que parte de esos recursos se destinan a compensaciones sociales.
Además, el Gobierno enfrenta atrasos de pagos que suman USD 1.659 millones, una cifra mayor a la de 2023 en el mismo período. Ortiz señala que para reducir el déficit se requiere “subejecutar” algunos rubros y sincerar cifras infladas en sectores como salud y educación. Con el último trimestre —el más crítico por la acumulación de facturas y el pago del bono navideño— el manejo presupuestario será clave para evitar un mayor endeudamiento.
Fuente: cortesía